De buenas a primeras puede sorprender el titular. “¿La saga de coches y persecuciones… con mensajes sobre la familia y la fe? El autor ha perdido la cabeza”. Es un pensamiento normal dado que las tramas de las películas no se prestan a un análisis muy concienzudo, pero como a veces pasa en el cine, hay más de lo que parece a simple vista, y lo mejor para descubrirlo es analizar con calma.
Por motivos obvios, este artículo contiene gran cantidad de detalles sobre casi todas las películas, por lo que recomienda haberlas visto para evitar sorpresas.
LA FE
Lo primero que podemos ver siempre, en todas las películas de Fast and Furious, es que el coprotagonista, Dominic ‘Dom’ Toretto (Vin Diesel), lleva una enorme cruz católica colgando del cuello que jamás oculta si tiene ocasión. A veces cambia de manos con una promesa de “volveré para recogerla”, pero es su cruz y nunca desaparece de la saga.
Concretando en los filmes, vamos a Fast & Furious 5 (A todo gas 5), donde tenemos este magnífico diálogo entre Dom y Brian (personaje encarnado por el tristemente fallecido Paul Walker): “Dom, ¿qué recuerdas de tu padre?”, “Mi padre… preparaba una barbacoa cada domingo después de Misa… invitaba a todo el barrio. Si no ibas a Misa te quedabas sin barbacoa”. No se puede ser más explícito en recalcar que la familia del coprotagonista era católica practicante, un legado que él no solo no rechaza sino que lleva con orgullo.
Avanzamos hasta Fast & Furious 7 (A todo gas 7), donde tenemos una boda religiosa con lo que ello implica: en iglesia y con sacerdote. En ella escuchamos a Dom decir “tenemos toda la eternidad”, a lo que el personaje de Leticia (‘Leti’, encarnada por Michelle Rodriguez), su hasta entonces novia, responde “no volverás a estar solo jamás. Juro que allá donde vayas iré yo, y el día que mueras yo moriré contigo”. Matrimonio indisoluble e irrompible, exactamente como dice la Iglesia católica, aunque evidentemente la “muerte” a la que hace referencia la actriz es metafórica, sin necesidad de morir físicamente si el otro fallece.
En esa misma película encontramos otra referencia explícita: cuando el villano Ian Shaw (interpretado por Jason Statham) muestra una granada, muchos retroceden asustados, salvo Dom, que no solo no muestra miedo alguno sino que avanza unos pasos y dice decidido “estoy listo para reunirme con El Creador, ¿y tú?”. El mensaje es claro: quien tiene fe y está en paz con Dios nada tiene que temer.
Y un detalle más que conviene no pasar por alto: en la mayoría de las películas hay una comida (¿guiño a una conocida tradición fílmica de Steven Spielberg?) en la que se reúnen los miembros de la “familia” de Fast and Furious, y en todas ellas se bendice la mesa. Ciertamente con palabras “extra” relacionadas con los coches, pero siempre se da gracias a Dios por la comida.
En Fast 9, Leti habla con un niño del que luego desvelaremos su identidad, y le dice “ahí conocí a tu mamá, justo ahí, te está cuidando desde el Cielo”. La fe en la otra vida sale a relucir.
No deja de ser curioso que en Fast X la familia intenta evitar por todos los medios que una gigantesca bomba destruya El Vaticano, centro mundial de la Iglesia católica.
Por último destacar que Vin Diesel, uno de los máximos impulsores de toda la saga, es abiertamente creyente. Fue grabado hace años junto a un coro de gospel: «Solo quería decir que siempre fue mi sueño tener la seguridad de cantar en un coro«, dijo el actor, «aunque mi abuela siempre me llevaba al coro todos los fines de semana, nunca tuve mucha confianza para llegar allí y cantar. Ahora que tuve la oportunidad, hice algo que pensé que era posible«. «Oh, día feliz. Cuando Jesús me lavó, cuando lavó mis pecados«, se le ve cantando con entusiasmo.
LA FAMILIA
La familia es tema nuclear en toda la saga, siempre siendo muy explícitos en que Dom considera a su equipo su “familia” por ser extremadamente cercanos y queridos entre ellos, además de siempre fieles y unidos para afrontar las difíciles tareas película tras película. Es un concepto muy de moda desde hace años: la familia no es solo la sanguínea, existiendo la que no eliges (en la que naces) y la que sí eliges (las personas más íntimas de tu alrededor).
Dom es, nuevamente, el encargado de decirlo, teniendo lugar en Fast 7 justo después del diálogo del Creador: “¿Has oído alguna vez lo de ‘el enemigo de mi enemigo es mi amigo?”, “yo no tengo amigos… tengo familia”; el enorme cariño que se tienen entre ellos y el apoyo que se dan lleva a esa pequeña exageración que, sin embargo, es constante en todos los guiones.
Volvemos a Fast 5. Tras el anterior diálogo sobre la Misa, llega otro sobre la familia de Dom por una pregunta de Brian: “¿Qué recuerdas de tu padre Dom?”, “pasaba todas las mañanas en el taller y todas las noches en la mesa de la cocina con Mia, ayudándola con los deberes, incluso después de acostarla se quedaba despierto unas horas para aprenderse la siguiente unidad y ayudarla al día siguiente. Lo recuerdo todo sobre mi padre. Todo”.
Por último, otro diálogo sobre la familia y el apoyo en ella: en Fast & Furious 6 (A todo gas 6), donde Leti reaparece tras haber, supuestamente, muerto en una entrega anterior. Dom y Brian conversan sobre esto: “Puede que la Leti que conocíamos ya no exista, que esté viva pero no sea la misma”, “no se da la espalda a la familia, haga lo que haga”.
LA RECONCILIACIÓN
Otro de los valores que podemos encontrar es la reconciliación, tan importante como la fe y la familia. Cuántos ejemplos de familias rotas por malentendidos y frases inadecuadas conocemos y, sin embargo, con la posibilidad de una reconciliación latente si dos o más de los miembros se reúnen para hablar con sinceridad y humildad.
Al final de Fast 8, tras una gran traición de Dom a la “familia” por asuntos de trama que no desvelaremos, vuelve con ellos y, una vez más, hay comida. El protagonista pronuncia estas palabras: “Siempre he dicho que no se da la espalda a la familia, y tengo que daros las gracias por no darme la espalda a mí”, acto seguido, una vez más, bendice la mesa.
También hay reconciliación con Shaw, quien salva a un hijo de Dom de la muerte, y además en Fast 9, en la que descubrimos que Dom tiene un hermano, Jakob, con el que no tiene trato y de hecho hay una fuerte rivalidad.
Jakob es traicionado por su socio, quien intenta matarle. Tras sobrevivir, no duda en ayudar a Dom y la familia, es consciente de que las autoridades irán a por él por los daños causados, por lo que Dom le ofrece una salida: “Hace años alguien me dio una segunda oportunidad, al menos te debo eso hermanito”. Sin desvelar el motivo, vemos que ambas películas hacen de la reconciliación entre hermanos algo muy importante. En Fast 10 Jakob ayuda a la familia en todo lo necesario hasta el momento de su clímax personal, de enorme fuerza: “Has criado un hijo alucinante, gracias por enseñarme la luz”, dice mientras, además, abraza la cruz católica, aunando familia y fe.
PROVIDA
Cambiando de tema, y sin tener relación obligatoria con la fe ya que no hace falta ser creyente para ser provida, la saga también apuesta decididamente por la vida desde su inicio, es decir, la concepción.
Volvemos a Fast 5, donde la hermana de Dom, Mia, dice ante éste y ante Brian, en medio de un momento tenso, “estoy embarazada”. La sorpresa de sus acompañantes pasa rápido a afirmación: “No iré a ninguna parte”, dice Brian, dejando claro su apoyo explícito a la maternidad y a su paternidad. La familia, lo primero, y el feto por delante. Dom, por su parte, no duda un momento, “te prometo que seguiremos juntos”, y el más importante, “nuestra familia ha aumentado”, dejando bien claro que ya consideran al feto parte de la familia y tratándole como lo que es: uno más. No necesita nacer, ya hay vida desde que ha habido concepción. El resto de “la familia”, nada más enterarse, celebra dicho acontecimiento, nadie ofrece “soluciones alternativas” mortales para el niño.
En otra de las películas, y ante la supuesta muerte de Leti, Dom entabla una relación con Elena, otro personaje que queda embarazada de él. Lo descubrimos mucho más tarde: “Supe que estaba embarazada cuando descubriste que Leti estaba viva, así que decidí que, cuando volvierais de vuestra luna de miel, te lo diría, pero nos capturaron antes de que pudiera hacerlo. Pase lo que pase, salva a nuestro hijo”. Dom acepta responsablemente su paternidad y lucha por ella.
Elena muere en otra película y ante la revelación y el asesinato de su madre, Dom y Leti acogen al hijo como propio y le llaman Brian, en homenaje al personaje que encarnaba el fallecido Walker. Ningún hijo sobra y todos son cuidados por la familia.
En Fast 8, Shaw mantiene un tiroteo con varios villanos mientras lleva al hijo de Dom. Uno de los villanos dispara a Shaw, que va con la cuna, y éste, tras dispararle a él, le dice “¿Ibas a disparar a un bebé? ¡Eres un degenerado!”, mensaje muy directo a quienes atentan contra la vida de seres inocentes.
Como se puede ver, tras una larguísima saga (aún por terminar) llena de persecuciones espectaculares también subyacen importantes mensajes que dan profundidad a sus personajes y sus relaciones y ayudan a apoyar la idea de que en la vida lo más importante es proteger ésta desde su inicio (la concepción) hasta la muerte natural y proteger a la familia, base de la sociedad.